Creo que una obra de , su F.U.C.K.- ID. (Free Universal Cut Kit for Internet Dissidence), resume mis sentimientos tras el estudio y la comprensión de cómo la infraestructura de las nuevas tecnologías no solo agrede a la vida, sino que replica antiguos modelos colonizadores de la represión, el control y el abuso. Una voluntad de desconectar, de salir de un circuito cerrado. Por tanto, esta entrevista con el artista se convierte en una clausura apropiada a mi paso por las activaciones de Webs of Water.
Tu proyecto F.U.C.K.- ID atenta directamente contra el concepto de la infraestructura tecnológica, en especial los cables submarinos, como parte vital de la seguridad internacional. ¿Te preocupa que propuestas artísticas que, por el momento, se consideran arriesgadas y reveladoras pasen a denominarse como delictivas tras un próximo cambio de escenario ideológico y político? ¿cuál es la intención tras la puesta en común de un dispositivo para cortar cables?
F.U.C.K.- ID. (Free Universal Cut Kit for Internet Dissidence) es un dispositivo autónomo movido por corrientes marinas que es capaz de cortar cables submarinos de Internet. Está disponible en mi página web para su descarga gratuita en formato .STL, para su posterior impresión en 3D. (https://escuderoandaluz.com/2017/11/01/free-universal-cut-kit-for-internet-dissidence-f-u-c-k-id/)
F.U.C.K.- ID sirve como un concepto de diseño crítico para arrojar luz sobre los problemas de control y vigilancia, visualiza los efectos sociopolíticos de la infraestructura física de Internet y devuelve a los usuarios la capacidad de decidir sobre sus datos y su privacidad. En esencia, es el botón de parada de Internet.
Contestando a tu pregunta; sí, me preocupa, principalmente porque ya ha ocurrido algo similar en numerosas ocasiones. Sólo hay que echar un vistazo a la historia, durante las guerra civil o la segunda guerra mundial cuanto los artistas de las vanguardias tuvieron que exiliarse, o al actual black-list de parte de Rusia hacia sus artistas, por mencionar un hecho actual.
En cuanto a si F.U.C.K.- ID podría ocurrirle algo parecido… Nunca se sabe, la verdad es que ahora mismo los gigantes tecnológicos tienen tanto poder que pueden anteponer sus deseos por encima de la lógica, la ética, la ley y el juicio para hacer lo que quieren.
Por otro lado, aunque F.U.C.K.- ID es un dispositivo que podría paralizar las conexiones de internet vía terrestre, y eso supondría pérdidas de dinero inmensas, por lo tanto un delito penal, pero no me preocupa que en un futuro pueda ocurrirme nada a mi. F.U.C.K.- ID es solo una herramienta. El delito es cortar el cable, yo solo invento herramientas. Además F.U.C.K.-ID se mueve dentro de los márgenes del arte y el diseño especulativo y reclama devolver a los usuarios la capacidad de decidir sobre sus datos y su privacidad. El objetivo es mas digno que el de la industria armamentística.
Para complementar F.U.C.K.- ID, en 2025 he desarrollado el mapa ‘The Fall Of The Fiber Optic Control, Power and Paranoia’ (https://escuderoandaluz.com/2025/08/10/the-fall-of-the-fiber-optic-control-power-and-paranoia/) que muestra todos los cortes documentados que se han producido en los cables submarinos de Internet, como una forma de exponer las vulnerabilidades y los sesgos de los sistemas dominantes.
¿Qué propones o imaginas como alternativa a la actual red de comunicación, en la que se replican las conexiones coloniales del pasado, para la extracción de datos masivos de la población?
Desde los inicios de Internet, artistas, visionarios y colectivos han imaginado la posibilidad de crear un ecosistema digital transparente y responsable ante sus usuarios. Por ejemplo, el teórico de los nuevos medios Armin Medosch trabajó para involucrar a los ciudadanos en la construcción de redes de bienes comunes, haciendo hincapié en el efecto emancipador y en la democratización de la tecnología, dando forma a tecnologías futuras menos elitistas y menos controladas por estrechos intereses comerciales o de seguridad. También colectivos, como servus.at y mur.at, gestionan y dirigen servidores de internet con servicios básicos de código abierto. Estas iniciativas incentivan tácticas de colaboración, creatividad colectiva y crítica en la construcción de sistemas alternativos y la resistencia al dominio de la tecnología centralizada y opaca. Combinan talleres y publicaciones para involucrar a las comunidades de investigación en la reflexión crítica a través de la comunicación directa, el debate y la colaboración.
¿Cómo pueden los artistas dejar de convertirse en una réplica del sistema de recopilación y reutilización de datos para sus propios fines alternativos?
Me alegra que me hagas esta pregunta, porque hay multitud de artistas que han incorporado prácticas y tácticas de resistencia en sus metodologías como medio para desafiar los sistemas dominantes. Por ejemplo, el artista Trevor Paglen se sumerge en el océano Atlántico para fotografiar los cables submarinos de Internet intervenidos por la NSA. (https://paglen.studio/2020/05/22/undersea-cables/) Al hacerlo, Paglen recrea una táctica fundamental, cartografiando los aspectos ocultos y subversivos de los cables de fibra óptica, al tiempo que aborda otros temas como la privacidad y la vulnerabilidad de las redes de datos, la contravigilancia y las operaciones militares secretas.
La artista y activista Joana Moll visualizó, de forma didáctica, el impacto ecológico de los cables de Internet en su conferencia titulada Deep Carbon, presentada en AMRO 2018.
Evan Roth (https://www.evan-roth.com/timeline/) visualiza y da a conocer cómo la estructura de Internet se ha centralizado, monetizado y convertido en un mecanismo de espionaje gubernamental global. Mario Santamaría con su Internet Tour (https://internetour.com/) ofrece una exploración colectiva de la infraestructura física de Internet.
https://goo.gl/maps/bJoixGvxhXmoZLVV8
El grupo Critical Engineer (https://criticalengineering.org/) ha desarrollado obras de arte, talleres y seminarios para exponer las implicaciones tecnopolíticas del uso y la dependencia de sistemas integrados y tecnologías complejas en red. Por ejemplo, en su obra Newstweek del 2011 muestran la facilidad con la que las grandes empresas pueden alterar, espiar o capturar los datos y las actividades de los usuarios.
¿Es imposible salir de este sistema de comunicación y dejar de comportarnos como un nodo que emite información según las preferencias personales?
Esto no es fácil, hoy en día; los datos se producen mediante el uso masivo de tecnologías interconectadas que pueden procesarse y analizarse a un nivel mucho mas alto de lo que era posible anteriormente. Estas prácticas se denominan «Online Tracking» y consisten en recopilar y perfilar datos de forma anónima a partir de la identidad, las referencias, los intereses, las intenciones y la personalidad de cada usuario.
El objetivo de la minería de datos es tomar decisiones automatizadas precisas. Para esta propuesta, empresas y plataformas como Google y Facebook ofrecen servicios en línea para recopilar y evaluar los comportamientos, las relaciones sociales y los momentos más privados de las personas.
Esta detección de los datos personales del usuario se consigue de muy diversas formas. Por ejemplo, a través de sensores e identificadores digitales, como direcciones MAC, direcciones IP, navegadores, cookies y otras tecnologías, que registran cada simple clic y transmiten la información a esas empresas.
Un teléfono inteligente puede almacenar información como llamadas, mensajes de texto, lista de contactos, calendario, notas, vídeos, sitios web visitados y ubicación GPS; y es utilizado por una sola persona, lo que lo convierte en un dispositivo de espionaje perfecto. ¿Es posible salir de estos sistemas de control y vigilancia? En fin, no lo creo, pero deshacerse de los smartphones podría ser un paso importante.
Aunque se advierte por diferentes medios del impacto ecológico y energético de las nuevas infraestructuras necesarias para mantener los recientes avances en computación avanzada, la respuesta de la población sigue siendo tibia.
No estamos para nada condenados a aceptar la destrucción de la vida como la conocemos en el planeta. Es simplemente que las consecuencias de estas nuevas tecnologías ocurren a muchos kilómetros y están ocultas por capas de tecnologías que lo hacen invisibles para los usuarios.
Es el caso de “Anatomía de la IA” de Crawford y Joler,
“Cartografía de la inteligencia artificial generativa” de Talleres Estampa,
o de mis últimos proyectos, “An Atlas to Track Blockchain Colonialism” (https://escuderoandaluz.com/2024/04/10/an-atlas-to-track-blockchain-colonialism/) o “The fall of the fiber optic control, power and paranoia”. Otras tácticas para salir de estos monopolios de infraestructuras incluyen la creación de sistemas locales “Mesh” o redes comunitarias. Estos proyectos desafían la centralización de los flujos de datos y ofrecen modelos de conectividad equitativos.
En este tema profundizo más en el artículo “Infrastructures of Dissidence: Artistic Tactics Against Internet Monopolies.” que se publicará pronto.